Hojitas de Otoño

Mi estación favorita! Para muchos es la primavera... para mi no, en la primavera las alergias me superan...

En esta maravillosa estación en que la naturaleza inicia un largo período de letargo, hay más humedad, las hojas caen y puedes oler ese aroma leñoso de los árboles cuando caminas por la naturaleza. El clima se vuelve mucho más frío y eso puede ser duro para nuestra piel. Las frías mañanas y la contaminación ambiental que suele descender sobre nuestras ciudades por el efecto invernadero hacen necesario algunos cuidados especiales  en manos y rostro, sobre todo, pues el resto del cuerpo suele estar mucho más cubierto y protegido por la ropa.

Inspirada en estos cambios y en los aromas que emergen desde la naturaleza he creado esta cremita. Lleva aceites vegetales sencillos, nada lujosos, pero que son un gran aporte a la piel dadas las condiciones a las que nos exponemos. Extractos vegetales cuidadosamente escogidos y una verdadera joya de los aceites esenciales en su aroma y propiedades aromaterapéuticas.

La he pensado para uso de día y de noche, para todo tipo de pieles, pero quizás sea mucho más apropiada para pieles jóvenes o de mediana edad (20 a 50 años) Incluso el bloque de emulsionantes lo he pensado con su "que" buscando un velo protector del frío y la contaminación.

Lleva Olivem 1000 emulsionante derivado de el aceite de oliva, provoca emulsiones con un velo mate satín muy elegante. Es un emulsionante versátil y está indicado para todo tipo de pieles aunque yo prefiero usarlo sobre pieles más secas y no tanto en pieles excesivamente grasas o con problemas de acné. A este emulsionante le apoya el alcohol cetílico y un pequeño porcentaje de cera de abejas cuyo efecto filmógeno crea esa capa protectora que estaba buscando.

En la fase oleosa aceite de oliva que es muy nutritivo y penetrante a pesar de su tacto algo oleoso, es un gran emoliente, suaviza, calma y cicatriza la piel. Aceite de palta (aguacate) un gran aporte para la protección de factores externos incluido el sol, el viento y el frío, favorece la regeneración celular y aporta elasticidad a la piel. Estos dos grandes aceites están acompañados por la joya de los Incas, el aceite de jojoba, hidratante y revitalizador, activa el metabolismo de la elastina y frena la pérdida de agua de las células. Por su composición tan similar al sebo humano es capaz de reforzar nuestra capa hidrolipídica y regular la producción sebácea. 

Contiene el dulce extracto de rosa damascena que aporta juventud gota a gota y extracto de tee tree que no sólo es capaz de proteger de todo tipo de radiación si no que además ofrece una protección antibacteriana, antiviral y antihongos de amplio espectro. No debemos olvidar que el otoño es la época en que se liberan gran cantidad de esporas de distintos tipos de hongos y viene un gran brote de distintos tipos de virus que también pueden llegar a afectar la piel.

Finalmente el broche de oro con el poder de los aceites esenciales, el principal y el corazón de esta sinergía descansa sobre neroli un aceite lujoso comparable con el aceite esencial de rosa damascena en su precio y propiedades. En la piel trabaja sobre todo tipo de cicatrices (estrías y arrugas son cicatrices) , rosácea, capilares rotos, piel sensible y madura, tonifica. Contribuye al equilibrio de pieles secas y grasas pues al igual que el aceite vegetal de jojoba regula eficazmente la secreción de sebo (nuestra grasita natural). A neroli lo acompaña el AAEE de cedro del Atlas y su gran poder astringente, trabaja bien en acné, dermatitis, exzemas, piel grasa, erupciones por hongos y erupciones cutáneas de distinto origen. Luego AAEE de ciprés otro buen astringente, eficaz en pieles con tendencia a grasa y brillo y/o con trastornos circulatorio desde rosácea hasta várices. Finalmente tenemos el AAEE de incienso o frankincense con su aroma de notas profundas un aliado para la piel mencionado en los papiros desde el tiempo del los egipcios, es un verdadero tónico para la piel actua sobre arrugas, manchas, piel seca y madura, cicatrices (de todo tipo) y heridas menores. Potente desinflamatorio para la piel.

Esta maravillosa sinergía como todas aquellas elaboradas con aceites esenciales no sólo trabaja en el nivel físico de las personas y ahí el poder de neroli viene a subir el ánimo que a veces decae un poco en estas fechas, antidepresivo y antiestres. Junto a cedro, ciprés y frankincense consuelan, calman y reconfortan el espíritu.

Quiero compartir mi fórmula para quienes se sientan inspiradas a copiarla o realizarla en su estilo propio. He reemplazado el agua al 50% por hidrolato de ciste (jara) otro potente antiarrugas. Sólo pido una condición: si la usas, la comentas, la publicas o la vendes, no olvides mencionar tu FUENTE (o sea yo). Hacer fórmulas en cosmética también implica derecho de autor igual que los textos, post, libros, canciones, música, coreografías, pinturas, planos, etc.

Hojitas de Otoño

A

Olivem 1000       6%

Alcohol cetílico  1,5%  

Cera de abejas   1%

Aceite de oliva    5%

Aceite de palta    5%

Aceite de jojoba   6,5%

B

Agua purificada/Hidrolato de ciste (jara) 66,3%

Ácido benzoico   0,4%

Álcohol bencílico  0,5%

C

Extracto de tea tree   2%

Extracto de rosa damascena 2%

Alantoina    0,5%

Ácido Hialurónico 1,5%

Vitamina  E        1%

Ácido cítrico    0,2%

AAEEs         0,5%  (Neroli, cedro, ciprés y frankincense)

Feliz Otoño!

 

La fase oleosa...

Iniciando la emulsión...

Terminando la primera etapa del batido...

Enfriamiento, el momento para incorporar los activos y AAEEs a menos de 30ºC